Pensando en esas historias de princesas que mi madre me contaba antes de dormir... Recuerdo lo bellas que eran las historias ¡Llenas de ilusión! Me imaginaba siendo una princesa, usando esos vestidos... Creo que hoy en día las niñas de la edad en la que llegue a usarlos, los considerarían ridículos.Esas historias se están volviendo pesadillas... fruto de insomnio. ¿Por que aún espero un príncipe? ¿Por qué?
Deliro y creo que a la mejor por fin has hecho caso a tu locura y que escuchas mi llamado y vienes por mi en tu negro corcel, cabalgando por mi, a mi tierra. A esta torre. Sueño que vienes por mi, sueño que vivimos en un "Felices para siempre"
Que pides mi mano... No sé... Esas viejas costumbres perdidas, que me escribes una carta de amor... (A mano por supuesto, pienso incluso en como se esta perdiendo este arte...) Que llegas con esas flores a decirme; que no me comparo. No sé, a pedir permiso, en fin... Esas cosas...
Hoy con tristeza, asumo que ya no hay eso... Bueno... Aún se lee en los cuentos... En las fantasías...
Ya no soy una princesa, esa pequeña que soñaba, con ser, la dama de tu castillo, la que velé por tus sueños...
Me comporto como una mujer, quizas cabrona (parecen valorarlas más) ¿Las respetan o les temen?... Nadie se mete con ellas... Hicimos pues, nuestro propio castillo de hielo, impenetrable... Y además, custodiada por dragones. ¿¿Y para qué??

Creo que deberían prohibír deliberamente que lo padres cometan este crimen! Cuentos de princesas.... ¡Bah! ¡Vivimos besando sapos! Creyendo que se convertirán en un príncipe, ellos no cambian, ¡Son! ¡Vaya cuentos! Han hecho de mis más altas expectativas, mis mas frustrados ratos.
Y aún así, educo a mi heredero como tal; como un príncipe. (¿Y para qué? Si hay tanta... plebeya o damitas que se han vuelto "cabronas".) No sé, si hago bien, pero sueño, que el sea feliz.
Encontré la respuesta que según yo, es la mas conveniente; ¡Que sea! Que nunca deje de ser un caballero, por más difícil que le sea. ¡Que viva! ¡Que intente! ¡Que persevere! Sólo se pierden en las batallas en las que ni siquiera se intenta. Quizás si yo comienzo a recordarle al mundo, que nos gusta sentirnos femeninas, coquetas, queridas, tratadas con respeto y cordialidad, ganemos la lucha contra los dragones. Y los caballeros o príncipes, quieran volver a encontrar princesas. Quizás en eso reside, en mi misma y no en las películas a las que hoy les guardo tanto recelo...
Algunas mañanas me despierto y me doy cuenta que el único dragón que me tiene presa en mi castillo, es el miedo a mis miedos. Así que me salgo de mi castillo y me marcho a trabajar ...
No me mal entiendas, amo saber que puedo salir, ser, soñar y ser quien yo quiera ser.
¿Una princesa moderna? ¡No! Sólo soy YO; Viviendo... Venciendo mis miedos, perseverando, cambiando, revolucionando, re-evolucionando, ¡intentando! Pero que aún así, te seguire esperando... |
Buenisimo, lo voy a compartir con mis amigas.
ResponderEliminarMe encanto.. Me puedo identificar totalmente con el sentimiento de no estar enamorada.. Pero esperar al Príncipe. Felicidades!!
ResponderEliminarAins, qué bueno qué les gusto.
ResponderEliminarGracias a Dios que no soy la única que piensa estas cosas :)
Un abrazo a ambos.